Ilustración en España. Siglo de Luces y de Sombras. El nacimiento del ensayista y el periodismo.
Luz de la razón y Luz de la crítica
LUZ DE LA RAZÓN. El conocimiento de las cosas, que proviene del discurso natural, que distingue a los hombres de los brutos, independente del que después se adquiere, o perficiona por el estudio o el arte. Latín. Lumen rationis. CRITICA. s. f. La facultad de hacer juicio y examen riguroso de escritos, obras y sugetos. Viene del Griego Crino,que significa Juzgar. Diccionario de Autoridades (1726-1739) |
Diego de Torres y Villarroel, almanaques, superstición y periodismo
El padre Feijoo y el ensayo moderno
"En grave empeño me pongo. No es ya sólo un vulgo ignorante con quien entro en la contienda: defender a todas las mujeres, viene a ser lo mismo que ofender a casi todos los hombres: pues raro hay que no se interese en la precedencia de su sexo con desestimación del otro. A tanto se ha extendido la opinión común en vilipendio de las mujeres, que apenas admite en ellas cosa buena. En lo moral las llena de defectos, y en lo físico de imperfecciones. Pero donde más fuerza hace, es en la limitación de sus entendimientos. Por esta razón, después de defenderlas con alguna brevedad sobre otros capítulos, discurriré más largamente sobre su aptitud para todo género [326] de ciencias, y conocimientos sublimes."
Benito Jerónimo Feijoo Defensa de las mujeres (1726) |
"Piensan algunos que la variación de las modas depende de que sucesivamente se va refinando más el gusto, o la inventiva de los hombres cada dia es más delicada. ¡Notable engaño! No agrada la moda nueva por mejor, sino por nueva. Aún dije demasiado. No agrada porque es nueva, sino porque se juzga que lo es, y por lo común se juzga mal. Los modos de vestir de hoy, que llamamos nuevos, por la mayor parte son antiquísimos."
Benito Feijoo (1676-1764) "Las modas" (1728) |
José Cadalso, las Cartas marruecas y la crítica a la nación
"Estas cartas tratan del carácter nacional, cual lo es en el día y cual lo ha sido. Para manejar esta crítica al gusto de algunos, sería preciso ajar la nación, llenarla de improperios y no hallar en ella cosa alguna de mediano mérito. Para complacer a otros, sería igualmente necesario alabar todo lo que nos ofrece el examen de su genio, y ensalzar todo lo que en sí es reprensible. Cualquiera de estos dos sistemas que se siguiese en las Cartas Marruecas tendría gran número de apasionados; y a costa de mal conceptuarse con unos, el autor se hubiera congraciado con otros. Pero en la imparcialidad que reina en ellas, es indispensable contraer el odio de ambas parcialidades. Es verdad que este justo medio es el que debe procurar seguir un hombre que quiera hacer algún uso de su razón; pero es también el de hacerse sospechoso a los preocupados de ambos extremos."José José Cadalso (1741-1782) Cartas marruecas (1789) |